La fragancia es descrita como un “floral chipre radiante” cuya flor central es la magnolia, rara en perfumería, tratada casi como una joya. El frasco también juega un papel importante: inspirado en una concha que simboliza feminidad, fabricado en vidrio en tono ámbar con detalles dorados y tapón negro con silueta orgánica.
Está fabricada en Grasse, es vegana y compuesta con alrededor del 90 % de ingredientes de origen natural, lo que apoya su perfil más moderno y “limpio”


